La Fundación de Seguridad Aérea (FaSA20) se presentó el 20 de agosto de 2023 coincidiendo con el año del 15ª Aniversario de la Tragedia del Vuelo JK5022, el peor accidente aéreo en la historia de España desde 1983.
Una encrucijada
Todo empezó tras estrellarse un avión modelo MD-82, el Vuelo JK5022 de Spanair, en la pista 36L del Aeropuerto de Madrid-Barajas. Se iniciaba la lucha por conocer la verdad sobre la suerte de las 172 personas a bordo, murieron 154 y sobrevivieron 18 con lesiones graves.
La encrucijada vital entre la desesperación, el insoportable dolor y la soledad o la opción de revertir todos estos sentimientos en un compromiso proactivo para la seguridad en el transporte aéreo, con el noble propósito de evitar que otra tragedia vuelva a suceder por las mismas causas o similares.
Lleva a la elección personal que hace Pilar Vera Palmés de ponerse al frente de la Asociación de Afectados del Vuelo JK5022 (AVJK5022) y de crear en 2015 la Federación Internacional de Victimas de Accidentes Aéreos y sus Familias (ACVFFI), reconocida por la OACI por primera vez en su historia, para llevar la voz de las victimas y familias a todos los centros donde tienen en sus manos la posibilidad de crear, mejorar, modificar o implementar normas en asistencia a victimas que dignifiquen la gestión de las emergencias después de una catástrofe aérea.
AVJK5022 y ACVFFI
El liderazgo de Pilar Vera Palmes ha llevado a la AVJK5022 primero y luego a ACVFFI a desplegar una serie de actividades, tanto a nivel nacional como internacional, que de alguna manera han contribuido a que los fallos que se produjeron en la gestión de la tragedia del Vuelo JK5022 se corrigieran en la aviación civil española además de impulsar normativas que protegen los derechos de los pasajeros que se convierten en victimas y a sus familias.
El Reglamento (UE) No 996/2010 en el que se introdujeron por primera vez mejoras respecto a la entrega de la lista de pasajeros a las familias en un plazo máximo de 2 horas después de producido el siniestro o a que los países miembros de la UE tuvieran un Plan de Asistencia a Victimas o que la información factual del accidente se diera antes a las familias de hacerla pública.
La elaboración del R.D. 632/2013 del Ministerio de la Presidencia que contiene un Plan de Asistencia a Víctimas de Accidentes Aéreos y Familias en España. El Protocolo de Coordinación de los medios para gestionar una emergencia del Ministerio del Interior. La inclusión en el Estatuto de la Victima del Delito del Art. 8 que impide a abogados y procuradores acercarse a las personas que hayan sufrido una gran tragedia hasta pasados 45 días del hecho causante, entre otros son medidas que con infinita paciencia se consiguieran.
Desde 2011 se solicitó reiteradamente a los grupos políticos en el Congreso de los Diputados de una Comisión de Investigación sobre la Tragedia del Vuelo JK5022, finalmente el Pleno de la Cámara del 13/05/2021 aprobó el Dictamen Final en el que se reconocieron a 18 responsables políticos y se determinó que la catástrofe del Vuelo JK5022 se debió a “un fallo sistémico de la aviación civil española”, contradiciendo la versión oficial de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de la Aviación Civil (CIAIAC) que en su Informe Final achacó la responsabilidad a los pilotos fallecidos.
La Circular 285 de la Organización de Aviación Civil Internacional (OAC), publicada en 2001, no se siguió en la gestión dramática del Vuelo JK5022. Pilar impulsó la revisión, junto con el apoyo del Presidente de la Asociación de Americana de Familias de Víctimas de Accidentes Aéreos y varias entidades. En la OACI se creó el Task-Force 285 que lograría bajo la Presidencia del Representante de España en el Consejo de la OACI, D. Victor Manuel Aguado, en tiempo record poner de acuerdo a todas las partes: Estados, organizaciones, OACI, NTSB y Víctimas. En 2013 se aprueba el Doc 9998 y que sería endosado y aprobado por la 38ª Asamblea de la OACI ese mismo año.
Víctimas ayudando a víctimas es el mensaje de ACVFFI, en el que Pilar Vera cree firmemente, pues todo lo que hace beneficiará a los que en el futuro tengan la desgracia de sufrir o perder a sus familiares en un siniestro aéreo. Ellos nunca sabrán lo que hacemos ni como lo hemos conseguido, pero sin duda alguna, no sufrirán lo que padecimos nosotros después de perder a nuestros seres queridos.
